Visita al Museo de Bellas Artes coruñés.

Como venimos diciendo, hay un subidón artístico en la familia. Así que Lidia, quería ver este Museo, sí o sí. Llamamos y nos ofrecieron una visita guiada en grupo. Nos pareció muy buena idea, y la verdad, lo fué. José, el guía, bien merece una visita, jeje, aparte del Museo. Un hombre superagradable y con una capacidad para contar historias, para enganchar a la audiencia (siempre difícil, porque solemos ir familias con niños de edades muy distintas) y para mantenernos en acción artística una hora y media, es todo un pedazo guía.

Yo creo que las fotos, enseñan mejor lo que quiero decir, porque todos incluídos adultos, disfrutamos un montón.

El grupo se fué juntando. Venían Thomas y Yassira, que aunque empiezan con un "claro que voy, con tal de perder cole...", jeje, pero después se animaron con la actividad, e incluso Thomas, para sorpresa de todos, sufrió un "ataque de emoción artística", jajaja.

La cosa empezó, con un Gigante Enfadado que nos esperaba en la entrada...

Después nos fuimos al mundo de la Mitología (dónde volveremos) de la mano de Dédalo e Ícaro...

Asistimos, impotentes, a una complicadísima partida de cartas, con tramposos, armas escondidas bajo la mesa, y un inminente lío que ocurriría justo después del cuadro...

Nos fuimos al mundo dieciochesco, lleno de retratos de nobles y monarcas, con pelucones de estilo francés y caras de no ser muy felices...jeje.

Y llegamos a pinturas más cercanas a nosotros en el tiempo, más coloristas, que esconden figuras que hay que buscar, y que invitan a la imaginación diversa. Hay un retrato original de Picasso que les gustó mucho.

Se hablaron de técnicas diversas para pintar, y en esa misma sala, hablamos de esculturas, y de cuadros dónde cada uno tiene libertad para ver lo que le apetezca. Hubo historias para todos los gustos, que incluso saltaban de cuadro en cuadro, jajaja.

Como final de recorrido, nos invitaron a desplegar esos artistas que todos llevamos dentro, jeje, y ante nuestra sorpresa, que pensábamos que todos, hambrientos, querrían irse, no solo se quedaron sino que pusieron todo su empeño en sus creaciones artísticas "para que luego algunos digan, que vamos mal en plástica" Thomas dixit, jajaja.