Hace ya tiempo que veníamos dándole vueltas a este concepto. Nos quieren convencer de que hay una crisis económica de gran calibre, pero lo que nosotros intuimos es que lo que está en juego no es esto. Lo que está en juego es creernos de una vez por todas que tenemos el recurso de autogestionar nuestras vidas, y debemos hacerlo. Independizarnos y crecer como personas, sin depender del yugo del capital. Todos esos procesos, largos en el tiempo, muchas veces se ralentizan por la urgencia del día a día, y se oscurecen por el entorno de auténtica emergencia social en la que vivimos inmersos.
(La jornada antes de la charla, empieza como empiezan estas cosas, jejeje, con comida en el merendero del Curruncho, y volada de cometas, jejeje).
Aquí, y en una crianza respetuosa y amorosa (no posible si la madre tiene que trabajar de sol a sol), encajamos esta propuesta, y estamos trabajando por ella.
Para fijar conceptos y saber bien de lo que hablamos cuándo defendemos esta postura, tuvimos la gran suerte de la visita de Mari Fidalgo, del colectivo Baladre, que para Kanguras vino a dar una charla y nos contó cosas muy interesantes. El olvidado mundo de los cuidados, del trabajo que no se ve, contrapuesto al empleo remunerado. Vino muy bien saberlo, así como fijar los conceptos de la Renta Básica Universal, un dinero que sale de la redistribución de la riqueza, que se traduce en una renta mensual, individual, incondicional, y universal que cambiaría la vida a todas las personas, y que se encaja en una propuesta de verdadera transformación social.
A Mari le hizo muchísima ilusión que era la primera vez que asistían personas niñas a sus charlas, y una de sus preguntas clave fué, relamente, ¿cómo nos cambiaría la vida, si no dependiésemos del dinero básico para vivir?.
Hay una Iniciativa Legislativa Popular, que intenta reunir 500.000 firmas para que se debata esta propuesta en el Congreso de los Diputados. No es que seamos utópicas y pensemos que esto se aprobaría, pero al menos que sirva para el debate y la difusión de algo que es posible y necesario. El discurso del pleno empleo ya no se lo cree nadie, y lo sabemos, pidamos entonces, plena dignidad para la vida de todas las personas. Desde Kanguras, y por eso el título de proyecto familiar, nos hemos hecho fedatarias de la campaña y llevamos el Centro Territorial de A Coruña, así que todas las que queráis firmar, ¡a por ello!.
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