Proyecto "Follas" (hojas).

Érase una vez... una pequeña semillita que volaba por el AIRE...
Se posó en la TIERRA, y la LLUVIA, la regó, y el SOL, tras salir el ARCO IRIS, la cubrió de calor. Así, allí acurrucado bajo un manto calentito, y bebiendo agua de la lluvia, nuestra semillita estaba tan agusto, que empezó a latirle el CORAZÓN, tan fuerte, tan fuerte, que empezó a crecer, para hacerle sitio a su corazón.
Primero le salió un tallito, que tubo que hacerse sitio en la tierra para salir a la superficie, y luego otros tallitos hacia abajo, para encargarse que nunca le faltase el agua y los alimentos de la tierra.

Tan buena había sido la madre tierra con la semillita, que esta quiso hacerle un regalo, y así, le salió su primera hoja al tallo.Pero le pareció poco, y seguió creciendo, creciendo, y por sus raices salieron otros pequeños tallos, y en unos cuántos años, la semillita le había regalado a la tierra un frondoso bosque lleno de vida...
Poco hemos podido hacer, dada la embergadura de este bosque, más que disfrutarlo de verdad. Sus robles y castaños centenarios, dejan sin palabras...

Al llegar hemos decidido que haríamos un árbol (vuelvo a pedir perdón, porque es una manualidad que he visto en algún blog, y no sé en cuál, para enlazarla) así que nos hemos puesto "brazos a la obra", jeje (mañana edito para aumentar, porque no lo hemos terminado, jeje).

Edito para añadir la imagen del resultado final, jeje, Hadri se animó con un nido y todo, y Lidia le dió a su árbol un toque purpurina... además de un poco de pegote con tierra, y unos toques de nubes de algodón... que no falte imaginación!